Antonio Montero: el alma de Ribeiro hecho vino

Abuelo, padre y nieto han mantenido la tradición no solo familiar sino local de producción de vino. Desde Orense, con la presencia de tres ríos, esta comarca gallega cuenta con D.O propia y siglos de conocimiento para trabajar la vid y obtener vinos frescos y frutales. La bodega Antonio Montero trabaja con variedades autóctonas y técnicas artesanales.

Vuestra empresa es totalmente familiar. Tres generaciones de Antonio han estado al frente de la bodega.

Nosotros pertenecemos a una zona con una gran tradición vitivinícola. En Orense, en Ribeiro se lleva elaborando vino desde hace miles de años. Se puede considerar como una de las DO más antiguas de España. Nuestra familia, como tantas otras de la zona, se dedica al cultivo de la vid desde tiempos de mi bisabuelo. Es verdad que era de una manera más artesanal, de autoconsumo. Poco a poco derivó en una venta a granel, sobre todo entre los años 40 a 60. Por las necesidades de la zona en aquel momento se pensaba más en cantidad que en calidad. No se apostaba tanto por variedades autóctonas o por productos de más calidad.

Ahora estás al frente de la bodega. ¿Qué cambios significativos se han producido estos últimos años?

Desde finales de los años 90, hubo una nueva corriente tanto en Galicia como en el resto de España, en la que se empezó a apostar por variedades autóctonas y producciones más pequeñas, de más calidad con un embotellado del producto y creación de marca. Empezamos a distribuir nuestro producto de otra manera. Hasta el año 2015, esta producción se hacia bajo la figura del colleiteiro que garantizaba que se producía con tus propios viñedos, sin poder comprar uva a otros y con el límite de 60.000 litros. En el 2015 cambió y empezamos a trabajar con proveedores de la zona, ampliamos producción y mercado.

¿Cómo es el paisaje de Orense?

En la zona de Ribeiro, el paisaje está marcado por la presencia de tres ríos: el Miño, el Avia y el Arnoia. La mayor parte de nuestros viñedos se sitúan en la margen derecha del río Miño y sobre el año 70 se construyó una presa y un gran embalse que marcan el paisaje. El agua es lo que se contempla desde todos los viñedos, en un ambiente muy rural.

Vuestra producción es artesanal, ¿en qué se traduce?

En esta zona hablamos de minifundios. Nosotros contamos con 6000 hectáreas divididas en 50 pequeñas parcelas. Es más complicado trabajar así por ejemplo con maquinaria o tractores. El trabajo por tanto es manual. La vendimia es por supuesto manual también. Las ventaja es contar con parcelas en diferentes altitudes, orientaciones y zonas, que permiten elaborar coupage de vinos compensando la falta de acidez de una zona con otra.

Hablando de vinos, ¿a qué saben vuestros los vuestros?

Trabajamos sobre todo blancos, casi un 90%. En nuestra bodega elaboramos poco tinto. Dentro de los blancos destaca su frescura con un punto de acidez marcado y con niveles de gradación alcohólica moderados. Muy agradables y afrutados. Son blancos que suelen gustar: son accesibles a todo el mundo por sabor y aroma. Con los tintos es diferente porque esta acidez está más marcada y son sorprendentes para un cliente que no busca tanto sabor a madera.

Respecto a los blancos, ¿qué maridaje recomiendas?

Por la presencia de la acidez, encajan muy bien con todo tipo de pescados. Me gusta especialmente el maridaje con pescado crudo como el tartar o incluso sushi, para equilibrar salsas. Por supuesto, todo el marisco, nuestros productos de proximidad aquí en Galicia, encajan muy bien.

¿Cuáles son vuestros próximos lanzamientos?

Aunque estamos en momentos de incertidumbre, tenemos en mente algún monovarietal más. De momento, lo más reciente que hemos lanzado al mercado ha sido un vino sin denominación de origen ya que teníamos excedente de Palomino. Hemos buscado un vino más sencillo y afrutado para entrar en un mercado con más rotación.

¿Por qué os unisteis a Spainery?

Por nuestra ubicación, nuestro mercado es marcadamente regional. Vemos que cada vez hay más competencia, más vinos y más bodegas. Se vuelve complicado vender. Todo lo que sea buscar nuevos mercados en el extranjero es nuestro objetivo. Creemos que nuestro producto puede encajar en Europa porque son vinos bastante comerciales que siempre gustan. Todas las herramientas para llegar a mercados internacionales son muy agradecidas. Hoy por hoy nos gustaría crecer en la Unión Europea.

Puedes encontrar los productos de Antonio Montero, aquí